Seguro que estás de acuerdo en que no todas las canciones nos llegan con facilidad. Aprender a cantar o tocar una canción difícil puede llevar mucho tiempo y ser frustrante.
Aquí tienes cinco consejos que puedes probar y que harán que aprender una canción difícil sea un poco más fácil. ¡Buena suerte!
1. Despacio
Una buena forma de facilitar el aprendizaje de una canción difícil es reducir el ritmo. Toca tan despacio como necesites, asegurándote de que tocas cada nota a la perfección. Te aconsejo que utilices un metrónomo para mantener el ritmo. Cuando puedas tocar con precisión y confianza, acelera ligeramente. Repite el proceso hasta que toques al ritmo deseado.
Aquí tienes un consejo extra. Intenta tocar la canción incluso más rápido que el tempo previsto, sobre todo si te estás preparando para una actuación.
2. Practica la sección más difícil
Concéntrese primero en la parte más difícil. Puede ser un compás, una frase, un ritmo o una figura. Domine esa sección y, a continuación, practique la música que la precede. Aumente el ritmo gradualmente, hasta que pueda tocar desde el principio de la pieza hasta la parte más difícil. Luego, toca el resto. La idea es evitar practicar sólo las partes divertidas y fáciles.
3. Aislar el ritmo y los tonos
Primero, domina sólo el ritmo de la canción. Aplástalo, cántalo o tócalo con una sola nota o acorde. El ritmo debería ser intuitivo. A continuación, aísla los tonos. Toca cada nota en orden, sin preocuparte por el tiempo. A continuación, combina el ritmo y el tono.
4. Tómate un descanso
Si no tienes suerte con una canción especialmente difícil, intenta tomarte un descanso. Haz otra cosa o practica otra canción. Cuando vuelvas a la canción difícil, intenta un enfoque diferente.
5. Memorizar la canción difícil
Una vez que puedas tocar la canción difícil con sólo algunos contratiempos, intenta memorizarla poco a poco. Una vez que la hayas memorizado, tocarás con más naturalidad.